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Sturzenegger, en modo bombero: propuso una fórmula privatizadora como salida al escándalo de los alimentos

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A través de un hilo de Twitter, el exfuncionario macrista anunció un nuevo mecanismo para la distribución de comida en «situaciones de emergencia», e inauguró un nuevo relato oficial para intentar tapar los desaguisados de Capital Humano. La propuesta se basa en recortar las funciones del Estado. Milei llamó a cerrar filas en defensa de la ministra. 

Por Melisa Molina / Página 12

Este domingo Javier Milei regresó al país en medio de la crisis desatada por Sandra Petovello, la ministra de Capital Humanoque sigue sin entregar a los comedores el alimento acopiado por el Gobierno. El lunes, en tanto, después de no estar durante toda la semana, el Presidente le tomará juramento al nuevo jefe de los ministros, Guillermo Francos y aún es una incógnita qué lugar le será asignado a Federico Sturzenegger. Más allá de la indefinición, y en medio de la confusión y el caos, el exfuncionario macrista ya actúa como si fuese ministro. Este domingo publicó en Twitter su propuesta para la creación de «un sistema alternativo al acopio de alimentos para situaciones de emergencia», tratando de correr el foco del escándalo. La idea del Jefe de Estado es que Sturzenegger asuma en una secretaría con rango de ministerio dedicada a la «desregulación del Estado», y adelantó que se juntará con él en las próximas horas «para definir el ministerio que va a tener, con el que avanzará con 3200 reformas estructurales». Por último, Milei admitió que utilizará «la inteligencia artificial para simplificar los marcos normativos de la Argentina».

El ministro sin cartera

Con una publicación en Twitter –que fue compartida por el Presidente– Sturzenegger hizo prácticamente su debut como ministro libertario. El exfuncionario de Mauricio Macri aún no está designado en su nuevo cargo, pero igual comenzó a actuar como si lo tuviera. Opinó sobre cómo debería proveer y actuar el estado en situaciones «de emergencia» con la entrega de alimentos, como si no fuese por inoperancia o mala praxis del propio Gobierno el vencimiento de alimentos que estaban almacenados en galpones de Capital Humano, mientras miles de comedores están sin poder dar de comer a las personas que más lo necesitan.

Sturzenegger derivó la conversación a qué debe hacer el Estado, en medio de «una catástrofe», con la compra de alimentos. Como si ése –y no el acopio injustificado de Pettovello– hubiera sido el origen del escándalo. «El gobierno provee ayuda en situaciones de emergencia. Pero lo hace mediante un sistema de acopio ineficiente y caro. ¿Existe un mejor sistema para lograr el mismo objetivo? A pedido del Presidente y la Ministra Sandra Pettovello diseñamos un sistema alternativo«, dijo y propuso: «En el nuevo sistema no se compran los bienes sino que compra una ‘opción de compra’ de esos bienes (en jerga financiera es un call). El sector privado cobra por proveer ese seguro y a cambio se compromete a la entrega de los bienes cuando y donde se le requiera».

Luego, agregó que «el sector privado usa toda su logística y capacidad de almacenamiento para proveer este stock. Y como ese stock rota, los productos estarán siempre disponibles sin que el Estado tenga que tener inventarios o tener un solo depósito». El docente de Harvard –así se presenta en sus redes– usó un ejemplo «doméstico» para graficar lo que quería decir: «Que el Estado maneje el stock es como si yo en vez de comprar un seguro de mi auto decidiera tener en mi casa los repuestos por si tengo un accidente», dijo. Y opinó que «la migración a un sistema de contratos contingentes barrerá con otro más de los mecanismos con los cuales el sistema político ha lucrado con la pobreza, claro está, hasta la llegada de Milei a la presidencia».

Fin de la gira y respaldo a Pettovello

El Presidente junta los labios como si fuera a dar un beso, pero está con el ceño fruncido. Mira para arriba, porque la cámara siempre lo apunta cenital, y levanta los dos pulgares frente al pecho. La cámara dispara y él se siente orgulloso porque, por fin, tiene su foto con Mark Zuckerberg, el dueño de Facebook. Para eso viajó a Silicon Valley junto a su hermana Karina el lunes de la semana pasada. Minutos antes de despegar había aceptado la renuncia de su jefe de gabinete Nicolás Posse. En el medio de una crisis en el gabinete por la renuncia del jefe de los ministros y de otros funcionarios en distintas carteras, con el país desabastecido de gas y desatado también el escándalo inocultable que generó Petovello, cinco días más tarde –como si nada pasara en la Argentina– Milei aterrizó en El Salvador en busca de otra foto para su colección. Esta vez con el presidente de ultraderecha Nayib Bukele, al que fue a ver a la casa de gobierno y le preguntó entre carcajadas: «¿cómo es esto de ser reelecto?». 

De regreso a la Argentina, ya con las fotos que deseaba en sus manos, el Presidente comenzó a preocuparse por algunos de los asuntos domésticos. Él mismo habría dado la orden a todos sus ministros de que salgan a respaldar a Petovello en las redes sociales. Se trata deuna funcionaria por la que tiene especial aprecio desde los tiempos en los que ella era productora periodística en “La Cornisa”, un programa del conductor Luis Majul, y él iba como entrevistado. 

El mensaje de los ministros fue reforzado desde su cuenta de X. En medio de reposteos que celebraban el día del perro, y recuerdos de Conan, el Presidente se tomó el domingo para darle RT a los mensajes que iban subiendo los ministros con fotos de ellos y Petovello. Fue el caso de Mariano Cuneo Libarona, de Justicia, quién calificó a Petovello como «genial», y «una persona íntegra»; de Patricia Bullrich, de Seguridad, que le dijo: «Vamos, Sandra! ese es el camino», y de Luis «Caputo«, de Economía, que opinó que «el país necesita muchas más Sandras, pero solo hay una».

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